El presente estudio se centra en un análisis legislativo del Protocolo de Cartagena sobre Seguridad en la Biotecnología con la finalidad de analizar los elementos necesarios para su posible implementación. Este acuerdo ambiental tiene el potencial para conservar el medio ambiente en esta época donde se ha incrementado el uso de la biotecnología en la agricultura. El Protocolo de Cartagena es la respuesta al llamado de los Estados Parte de la Convención de la Organización de Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica (CDB) para tratar las preocupaciones de la seguridad en la biotecnología, específicamente la transferencia, manipulación y utilización segura de los Organismos Vivos Modificados (OVMs). Después de innumerables debates, la Conferencia de las Partes (COP) culminó en el ‘Mandato de Jakarta’ en noviembre de 1995, bajo el cual se estableció un grupo de trabajo para negociar el Protocolo de Cartagena. Las primeras reuniones en la negociación del Protocolo, que comenzaron en 1996, fueron cruciales en el establecimiento de las prioridades de los Estados, y la identificación de puntos controversiales respecto a la bioseguridad y los OVMs. Después de largos debates, se alcanzó un compromiso. El Protocolo de Cartagena sobre Bioseguridad fue adoptado finalmente por la COP en enero del 2000. El objetivo del Protocolo
origen de los transgenicos
Desde que en el 7.000-8.000 a.C. se desarrolló la agricultura allá por los valles de Irak, la humanidad no ha dejado de investigar y aplicar la experiencia y el conocimiento para que los resultados de esas cosechas fueran cada vez mejores, en cantidad y calidad. Ese desarrollo se centró en obtener primero las especies de plantas más adecuadas. Puede resultar extraño, pero no lo es, que entre los millones de especies de plantas que hay en el mundo, sólo un puñado, la mayoría cereales y leguminosas, se revelaran como las especies más adecuadas para usarse como alimentos. Maíz, trigo, cebada y arroz junto a la soja son la base de la alimentación humana y animal. Y este es un proceso continuo en el que se han usado las herramientas, tanto físicas como conceptuales, que se tenían a mano en todo momento.
www.cbd.int/doc/legal/cartagena-protocol-es.pdf